Empieza el ritual.
Me siento a mirar el papel sobre la mesa en el cual empezaré a escribir... Puse música, poco a poco mi cuerpo se relaja y mi mente comienza a desprenderse de los recuerdos, de alguna palabra susurrada al oido mientras haciamos el amor...
No, no lo ame. No fue a él a quien ame, pero fue él quien estuvo a mi lado mientras lloraba por David.
David, ese hombre a quien le entregue en un cofre lacrado años de mi vida, años tristes, pero llenos de esperanza.
Fur él quien me aceptó, el que me entregó su amor, un amor que yo no supe ver hasta después del adiós.
La historia es larga, pero cabe en algunas lineas.
Su amor era incondicional, el me cubria en sus brazos y me dejaba llorar junto al fuego del hogar, me hacia el amor más dulce que alguien pudiera imaginar y me contaba al oido nuestros planes de amor.
Pero yo no lo supe valorar y tras años de esperar un poco de amor de mi parte se cansó y nos dijimos adiós.
Uno se da cuenta de lo que tuvo cuando lo perdio, fue eso lo que me pasó a mì.
Noches enteras lo busque y lo llamé a gritos ahogados pero él ya no estaba a mi lado, las veces que acudia a mis gritos de amor, ya no era igual, no me miraba pero sus ojos se llenaban de lagrimas y de sus labios salian esas palabras tan dolorosas "Ya no puedo darte amor"
Mi alma salia de mi cuerpo y bañada en llanto le pedia otra oportunidad; pero era en vano en su corazón bastante herido ya no cabia mi amor.
Una tarde descubrí sin querer, que ella mi mejor amiga, compartía con él mi lado de la cama...
No quise creerlo y fui hasta la casa donde viviamos juntos para que me mirara a los ojos y me dijera la verdad... Entré, no habia nadie, recorri las habitaciones en silencio, con el corazòn oprimido por la verdad que estaba a punto de descubrir...
Las cosas de ella desparramadas por toda la casa, cartas mias sobre la mesa, en el baño sus perfumes... Me miré al espejo y vi mis ojos hinchados por tanto llorar, vi mi cuerpo insignificante tras ese reflejo que me devolvia la verdad con toda dureza... Mi decisión estaba tomada.
Fuí hasta la cocina como pude, temblando por los nervios gritando insultos incomprensibles (Habiendo tantas mujeres ¿por q ella?) Rompí un florero contra la pared y comencé a cortarme los brazos... La sangre salia a chorros de mi cuerpo, mi llanto me cerraba la garganta y me ahogaba. Salí de la casa llevandome todo por delante marcando mi salida con la sangre que salia de mis venas que habia logrado cortar, la gente por la calle me miraba asustada y yo temblaba con el vidrio en mis manos.
Me agarró una mujer, quen me tiró al piso cubriendome en sus brazos, llorando como si mis heridas lastimaran su alma.
Una semana estuve internada, completamente sedada... Aun tengo las marcas en mi cuerpo, las marcas de la verdad.
Nahuel aparecio en mi vida al poco tiempo de que me dieran el alta... Su cara de nene bueno y su sonrisa de angel presuntuoso me hicieron creer que era alguien que en verdad no era.
Una día hicimos el amor y la piel que teniamos era tan fuerte que no podiamos vernos sin entregarnos al placer.
Una noche me vio llorando por David, me abrazo fuerte y diciendome que me queria me prometio que me iba ayudar a ser feliz.
Ahi comenzó mi castigo, el castigo que yo buscaba por haber dejado morir el amor que David me habia tenido...
Poco a poco fui descubriendo quien era en verdad Nahuel. Yo lo quería sí, pero no lo amaba, era su píel lo que buscaba.
Yo creia que él no me mentia, pensé que era él quien iba a curar mi corazón (Que ingenua) Pero claro, no fue asi.
Al poco tiempo sus ganas de que lo vea con otras mujeres me hicieron querer creer que era asi como yo debia castigarme, comencé a hacer cosas para herirme y fue asi como termine transitando un túnel frio y oscuro. Yo seguia llorando pero también seguia permitiendo todo ese dolor, esa humillación, y el temor de que otra vez me dejaran por una amiga me hizo convertirme en lo que èl queria...
Conoci a Veronica una rubia divina con una vida similar a la mia, le abri mi mundo, le preste mi casa (Donde viviamos con Nahuel) para vivir, le di trabajo ¡Todo!
Ella era muy parecida a él y a mi. A él en todo los errores, (ella es actriz porno en Argentina) le gustaba el sexo desenfrenado, las drogas, y yo no era asì. Ella tenia más en común con él que yo siendo la novia (el no se volvió a drogar durante el tiempo que estuvo conmigo, pero desde que ella se vino a vivir con nosotros empezò otra vez)
Yo confiaba en ellos, por que en más de una ocasion me jurarón que entre ellos jamás pasaria nada (¡Me miraron a los ojos!) yo les crei, o mejor dicho quise creerles les di siempre la oportunidad de que no me mientieran, siempre prefiero la verdad aunque sea dolorosa y no una mentira...
Una tarde los encontré en nuestra cama, no les dije nada solo los miré, cerré la puerta y me fui a la cocina a pensar por que otra vez me pasaba lo mismo... El vino a mi, sin mirame a los ojos me dijo que nos amaba a las dos y que nos necesitaba (HDP)
Me fui para siempre de su lado, y ella se quedo con èl.
Hoy me doy cuenta que gracias a esa traiciòn pude salir de ese mundo humillante para emprender una nueva vida, comprendi que no vale la pena dejarse lastimar, hoy me Quiero como persona... Estoy sola sin nadie màs que mi alma y yo... Sin amor, pero tranquila y puedo llegar a decir que soy Feliz por momentos, por que de eso se trata la felicidad... Son momentos... Momentos que hay que vivirlos...
